Me levantó, arrancó la matina, una hora después me dirijo a la cocina para preparar mi bendito desayuno, prendó la hornalla... se me da por mirar a un costado y veo una cosa negra en la "bacha" (espacio que hay para lavar los platos) de la mesada.
Primero pensé que era una super araña, pero luego veo que se mueve y que a su alrededor había como "caquita". Esa cosa negra era un puto murciélago, ¡y estaba vivo! Parecía la Su... cuando se mandó la del dinosaurio. ¿Viiiiivooooo?
Entré en pánico... no sabía qué hacer, cómo salir de esa situación, y si desplegaba sus alas...
No les puedo explicar mi estado, corrí a atarme el cabello, y maquinar un: "QUÉ HAGO"- "Quién me rescata".
No hay un soldado Ryan... mucho menos un chapulín colorado. Disponibles 24/7.
Mientras maquinaba y pensaba en mil teorías, ni que fuera a tomar un vuelo a la Luna, dije: "Le tiro lavandina y que se cague muriendo...", corro al baño a buscarla, vuelvo a la cocina, tiro un chorro y la cosa negra... se entra a mover! ¡¡¡¡PÁNICO!!!!
Llamó a una amiga por Skype (en mi "desesperación por respuestas"), la yegua marta se mató de la risa. Lejos estaba de reírse conmigo. En ese interín tiró agua hirviendo (la que era para el mate).
Fue un "chooou" llamé a un amigo, naninga (nada). Mientras tanto, la persona vía Skype googleando cómo sacar un murciélago de una casa. Llamó a mi vecina, no atiende. Hasta que dije mi amigo M me ayudará; lo llamó (mi inálambrico a nada de quedarse sin batería) a su depto (vive en el edificio frente al mío).
No entendía ni cinco, pero dijo: ¡ahora voy!
Ahora que fueron 20'. Habría que ver qué se entiende por "ahora", pero eso es para otra entrada. Vino equipado: llegó con una caja + bolsa... Se me rió en la cara, pero el tarado (lo adoro) tuvo un poquito de pavor, entramos a la cocina y la cosa negra no se veía.
En un momento pensé que todo fue producto de mi imaginación. Pero noooooo... esa porquería de bicho (que tienen la rabia) se retorcía en mi puta bacha... de mi cocina! ¡OOH, por Dioor!
Comenzó la operación #MuerciélagoDie. Con la mayor de las cautelas y armado con una pala (de juntar la mugre) capucha en su cabeza, bolsa y caja en mano retiró al maldito invasor. Encintamos la caja y se fue a la basura. Error mío no llamar a zoonosis y compañía. Un alma me dijo: llama a los bomberos... ¡bueeh, tampoco la pavada! Desinfecté mesada, tiré rejillas y esponja. El maldito, cago en un vaso. ASCO. La mesada sigue con todos los productos que se puedan imaginar. Agradezco a Dior que no tomo vuelo, ni invadió otros sectores de mi hogar, ni mi cabello. Moría de un sincopé.
***
Hoy martes, "el chico que se dedica a combatirlos", vino para pasar un presupuesto. Me dice: en el taparrollo seguro tenés "como una cueva"!! ¡¡¡WTF!!!
Bueno, cuestión a la tarde la dueña me avisa si aceptan su presupuesto o hay que seguir buscando. En caso de aceptar, tienen que desinfectar + sellar el depto + otras medidas.
Tendré que buscar asilo para una noche...
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