Día 35: El lado Betty
Y que conste que esta entrada no es para hablar de
Betty, la fea.
Ni es un modo
clickbait de hacerlas entrar engañadas.
El lado Betty nace desde el momento en que decidí darle una manita a Gabba... y porque mi segundo nombre es Beatriz.
Queridas almas derraperas, en aquella época en el que era furor la aclamada novela colombiana, me atormentaban con ese sobrenombre, y lo detestaba, llegué a aborrecerlo. Comencé a cuestionar la razón por la que me habían nombrado de esa manera. Al parecer fue en honor a la que supuestamente iba a ser mi madrina.
Jamás la conocí.
Imaginen que a este punto de mi vida lo que menos me molesta es el nombre de un personaje de telenovela (?)
No sé por qué me estoy yendo por las ramas. Recapitulando el tema importante de la entrada, la
versión B(etty) de las entradas
#QuédateEnCasa de
Gabba nació por la necesidad de darle un pequeño apoyo moral y afectivo a mi pequeña retoña y compa de aventuras.
Hace un tiempo que me motiva a que haga mi propia versión de entradas contando mi día a día, específicamente haciendo uso de mis 15 minutitos de escritura.
Accedí porque... hace bastante que no dejo ni una bendita reseña y me siento bastante mal al respecto, y porque es mi modo de hacerle saber a Gabbs que tiene mi apoyo y gratitud. Pequeña, estuviste en las buenas y en las malas; ahora es mi turno.
(Por esas cuestiones del destino mientras escribo mi mamá se puso a escuchar “Se dice de mí” de Tita Merello... NO INVENTO. NO-LO-PUEDO-CREER).
La facultad me está succionando la vida cual dementor. Cuando se implementó la modalidad de las clases virtuales en mi universidad, creí que iba a ser bueno, que podría estudiar desde la comodidad de mi hogar y tendría clases online en la que me explicarían como si fueran presenciales. ESTUVE TAN EQUIVOCADA. Hasta ahora he tenido un par de clases en vivo en
Instagram y solo he recibido montañas de PDFs. Hace una semana que no toco ni un libro digno de derrape.
Anoche me dormí a las 10pm y hoy me desperté a las 11am.
Y mi vida es la de un triunfador.
Sí... no estoy llevando bien la onda online.
La semana que viene tengo que entregar cuatro trabajos prácticos, hacer resúmenes y leer más PDFs.
Hay materias de las que aún no tengo noticias y me preocupa.
Hay compas en mi cursada que abandonaron hasta el año que viene porque no pueden sobrellevar la modalidad. Hay compas que sufren crisis de histeria con un solo trabajo práctico. Y yo, la verdad... estoy como ese meme del perro sentado en una habitación en llamas.
This is fine.
No sé qué será de mí en los parciales, ni hablar de los finales.
Solo espero poder tomarle el ritmo y poder nivelar las dos cosas: Los estudios y el blog, que tantas alegrías me trae. Y... si les soy sincera, la idea de Gabba de escribir quince minutitos al día no está nada mal. Pensé que no tendría nada que decir. ¿QUÉ TUL?
Tengo curiosidad por aquellas almas derraperas que estudian. ¿Cómo lo llevan? ¿Hay docentes o profesores siguiéndonos? Hace un tiempo vi en una publicación de Facebook, ¿Cómo harán los estudiantes de gastronomía? Son preguntas que no me dejan dormir (?)
Espero que esta entrada les haya gustado. Honestamente, no tengo idea de lo que acabo de escribir, pero me siento un poquito más ligera.
2 Comentarios
GRACIAS por cubrirme en el día 35 y bancarme en un domingo digno de #CrisisDeMiércoles (?) ¡Qué loco este vaivén emocional!
ResponderBorrarReí tanto con "(...) hace bastante que no dejo ni una bendita reseña...". Hola, qué tal...¡!
Abrazos potenciados a la enésima.
Ivs! Que bueno saber que no estoy sola en todo esto de la vida universitaria virtual. Parece que en serio no puedo lograr concentrarme, más allá de entregar los trabajos prácticos, hay 3 materias que aún no toqué...
ResponderBorrarOlvídate de que lea algo solo por diversión. Pero en fin, necesito un poco de risa en mí vida, espero poder tenerla en breve.
Gracias por contarnos tu día
Abrazos enormes virtuales