Día 52

Jamás pensé que llegaría a armar 52 entradas de corrido; 51, chiquita (hola, "Lado B(etty).
Hace 52 días que estamos en aislamiento sin un fin cercano, ¿o sí? (necesitan que entre dinero a la caja mayor, en cualquier momento tendremos novedades), y yo con esta especie de diario virtual donde comparto mis emociones.
Escribirlas ayuda a visualizarlas, comprenderlas o, al menos, intentarlo.
Hoy, me aburre.
¿Será que siento que soy reiterativa, redundante y eso me provoca fiaca?
Ni sé si hay alguien del otro lado leyendo, esporádicamente viene ese interrogante. También tiene respuesta: ¿Importa? Es tu espacio para liberar todo lo que atraviesa tu mente. ESCRIBÍ, 15 minutos por día.
Salí al patio, estoy aprovechando el ratito que da el sol; tratando de desconectar.
Durante el día también tuve un par de preguntas muy de miércoles, de temáticas muy aleatorias.
⤖¿Qué tan mal tiene que estar una persona para contaminar la mente de otra?
⤖¿Cómo estará la gente que convive y se llevan como el ort*?
⤖¿Algún día alguno de los profesores nos preguntará cómo estamos? Perder 10 minutos para hacer una "insulsa" reflexión, algo.
⤖¿Qué haremos cuando nos digan son "libres" de hacer lo que se les plazca? Libre, ¿qué era eso?
⤖¿Estarán conectándose con su yo interior?
También desfilan una mar de ideas-proyectos, es un soñar constante.
Emprender, cada día amo un poco más esa palabra.
Mientras tanto, sigo con las clases virtuales, las charlas telefónicas, los problemas del cotidiano, la ansiedad por leer todo el material facultativo... aunque estoy en modo ahorrativo de pensamientos tremebundos.
Hay tiempo, enfoca las energías.

P.D.: Tentada con la elección de la imagen para el banner. Lloré de la risa, suenan las sinceras. ¡Ridiculeces de miércoles!